domingo, 21 de julio de 2019

Eurotrip: Stelvio endurance [Día 7]

Voy a describir el día de conducción mas duro que he vivido jamas. Atras quedan el viaje a Granada en el corsa del tirón, los viajes de ida y vuelta el mismo día a Barcelona o Madrid en la combo o el viaje de ida a Nurburg el año pasado por nacionales francesas. Hoy hemos recorrido algo menos de 600 Km y hemos pasado mas de 10 horas al volante. Física y psicológicamente el desgaste ha sido bestial. Ahora entrare en detalles.


El día ha comenzado en Ulm desayunando en el hotel antes de las 8 de la mañana. Os puedo asegurar que he engullido hasta casi explotar sabiendo lo que se nos venia encima, pues eramos conscientes de que fácil no seria. Tras desayunar hemos partido sin perder mucho tiempo. Primera parada: Fussen, la atracción turística mas visitada de Alemania (y siendo domingo).

Vista la cantidad de gente y lo que nos podría retrasar, aparte del mal tiempo y las esporádicas lluvias, tras hacer 4 fotos hemos abandonado el lugar. Precioso si, pero no para verlo con nuestro limitado margen, una pena. Supongo que en el futuro habrá que volver con mas calma. Me encantaría verlo bien.


Tras cruzar Austria sin "parar" (vaya atascos) hemos entrado a Italia y se nos ha pegado la tontería del lugar rápidamente. Una vez en Italia llegar al ascenso al Stelvio ha sido breve, apenas 50 Km desde Austria y ya habíamos iniciado el puerto.

La zona de los alpes entre Italia, Suiza y Austria era preciosa. Una meseta llena de lagos y embalses. Una pena una vez mas ir con tan poco margen, pero aun así las vistas increíbles. Repito, ojala algún día volver con calma.

Durante el ascenso nos hemos detenido mas o menos por la mitad para descansar de la caravana de coches y autobuses y de paso, hacer algunas fotos en un parador muy bonito que hemos pillado libre.

Queríamos comer pero era bastante tarde, de modo que hemos tenido que esperar hasta llegar arriba para ello, que eran ya sobre las 4 al aparcar. Para ser julio se notaba la altitud. Fresco pero pegaba el sol con ganas y sobre todo la nieve. Comer a estas horas aquí no ha sido problema y el precio muy bueno (ademas del hambre que teníamos).


Que decir de las vistas, impresionante donde hemos llegado. Parece mas fácil visto que hacerlo, las "tornatti" agotan, sobre todo cuando haces 88 del tirón.


Iniciamos descenso por el lado de Bormio, la famosa cascada. He de decir que no es tan "espectacular" el trazado de este lado pero visualmente es superior, increíble es poco decir. Menudo lugar. Pasas de estar en un páramo sobre una meseta a descender una pared de horquillas.

Creíamos que los tramos de montaña ya habían terminado, que gran fallo, pues sin comerlo ni beberlo nos habíamos metido en un puerto todavía peor. Bacheado, estrecho y miles de curvas. Un horror para el cansancio. Parecía que sería mas rápido, pero nos retraso por las paradas que hicimos para refrigerar frenos y para descansar un poco.

Pasamos Pratto de Carlo Magno casualmente. Y una vez mas, cuando creíamos que esto terminaba, un puerto mas. Después de 3 puertos de horquillas (y este ultimo ya con mas trafico al ser carretera mas fluida) las fuerzas fallaban... llegábamos tan agotados que decidimos pasar de ver el lago de Garda, pues nos retrasaba una hora mas la llegada a la estancia. Nos hemos ido a cenar y descansar para mañana continuar hasta Modena. Una odisea de viaje el de hoy.




No hay comentarios:

Publicar un comentario