Todo empezó hace ya algunos meses. Cuando Pablo buscaba comprar su primer coche. Después de varios intentos de ver un EH3 en Olaz, de la nada un amigo de Noja me dijo que vendía su EG5, casualmente se lo comente a Pablo y ese mismo día el perla del EH3 le dio largas al vendérselo a un amigo supuestamente por 100 euros mas. No tardamos en hablar con el chico de Noja, y 3 días mas tarde ya teníamos planeado un viaje para verlo... y traerlo. Tras esperar si Juan decidia ir o no a por un Accord en Santander (finalmente se fue a Guadalajara a por otro), el miércoles 25 pillamos pista y nos fuimos a Noja.
Partimos a las 2 aproximadamente, para llegar a Noja a las 4, no obstante paramos en Sestao para charlar un rato con Yaiza. A las 5 estábamos esperando a que Dudu apareciese con el EG en la entrada del pueblo. Y alli apareció, y Pablo quedó por unos minutos embobado. Salimos a probarlo un poco.
Tras un paseo de prueba, La sonrisa de Pablo era aun mayor. El coche iba de lujo, tiraba con mucha rabia para tener 125 cv, en bastante buen estado y con unas cuantas mods bastante buenas. Nos liamos a charlar mucho rato, descuidamos mirar bastante el coche pero no habia mucho que mirar, puesto que el vendedor al ser un conocido se porto bien y fue bastante sincero con el uso y estado.
Nos movimos un poco en el EK4 que ha comprado Dudu, preparamos el papeleo en casa de su abuelo tras 2 intentos de ir a una tienda donde hiciesen fotocopias, recogimos las piezas extra que nos entregaba de un trastero en un 5º sin ascensor y ya estábamos, a las 8:15 listos para salir rumbo a casa. Lo primero que necesitábamos era repostar ya que casi estaba en reserva.
Parada rápida en la primera gasolinera que pillamos (20 litros, 25 euros, la gasolina 13 céntimos mas cara que en Pamplona), arranque hasta Sestao, cena en el Mac, otra parada rápida en Salvatierra para darle la sorpresa a Manzano (que nos vio ir rumbo Bilbao casualmente y whatsappeo) y ya directos a casa. A las 11:30 estaba en la cama al fin. Ya hasta el viernes no volví a ver el EG, junto con el Accord de Juan, que quedamos por la tarde como acostumbramos. Espero que ambos coches se queden para mucho tiempo (El EG para mas, ya que cruzo dedos para que Juan de el salto a un typeR en unos años) y podamos disfrutar todos juntos.
Increible resumen de la historia, graciass :)
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